Los 4 tipos de apego desde la Psicología

tipos de apego

24 Ago Los 4 tipos de apego desde la Psicología

Nuestra personalidad, como nos comportamos, incluso nuestra autoestima pueden estar íntimamente relacionados con el tipo de apego que hemos podido desarrollar, principalmente, en nuestra infancia.

De todos es sabido que la forma en la que nos desarrollamos es esencial para nosotros en vistas al futuro y esto se debe, de buena manera, a los lazos que hemos ido creando en la vida con nuestros progenitores, cuidadores o personas más cercanas.

Unos lazos que evolucionan y se pueden transformar de diversas maneras o formas dando lugar a personas muy diferentes y, como no, también a distintos tipos de apego.

¿Qué entendemos cuando hablamos del apego?

El apego podemos entenderlo o definirlo como el vínculo emocional profundo y duradero con personas significativas para nosotros. Un sentimiento o una unión que se vuelve mucho más importante en nuestra vida si se establece con personas que nos han ayudado y han formado parte de nuestra crianza; generalmente padres y madres. Aunque pueden haber sido también tíos/as, abuelos/as etc. No es exclusivo solo de nuestros progenitores.

En las edades más tempranas, cuando somos unos niños, somos totalmente dependientes de otras personas, que son las que nos cuidan, enseñan y protegen. Sin ellas no hubiéramos podido sobrevivir y desarrollarnos ¿Verdad? Es por ello que las personas estamos biológicamente preparadas para vincularnos y formar esa unión o apego con las personas que forman parte de nuestra vida. 

La teoría del apego según Jonh Bowlby

¿De dónde viene todo lo que te estamos contando ahora mismo? Del conocido psiquiatra y psicoanalista infantil Jonh Bowlby (1907-1990). Un profesional que dedicó su carrera a estudiar los efectos de la relación entre el cuidador principal (Padres/tutores) y el menor, en la futura salud mental del mismo y en las consecuencias de esta relación en su edad adulta.

El señor Bowlby concluyó tras su estudio, lo que antes mencionábamos, las capacidades personales y de superar las adversidades a nivel emocional estaban relacionadas con los vínculos formados los primeros años de vida. Haciendo una diferenciación entre lo que podía ser un apego seguro y un apego inseguro.

El apego seguro se podía entender como aquel que se ha desarrollado de forma saludable y beneficiosa, ya que las figuras que el niño necesitaba han estado para él o ella a todos los niveles.

Sin embargo, el apego inseguro, siendo el más conocido, es el que ocurre cuando ha existido alguna carencia en el cuidado o en las necesidades del pequeño. Veremos ahora este último con mayor detalle.

Los diferentes tipos de apego

Los tipos de apego emocional que categorizó Jonh Bowlby, como hemos visto anteriormente, se dividían entre apego seguro e inseguro, pero dentro de este último podemos diferenciar entre otros subtipos: apego ansioso y ambivalente, apego evitativo y apego desorganizado. ¿Vamos a ello?

Apego ansioso y ambivalente

Este tipo de apego aparece o se va construyendo cuando nuestros cuidadores no se encontraban siempre para nosotros desde el punto de vista emocional. Están unas veces sí, otras veces no, lo cual genera una incertidumbre que posteriormente se traslada a nuestra emocionalidad futura.

Al no saber si esa persona estará o no cuando la necesitemos, se nos genera un miedo a separarnos de ella y una ansiedad o angustia al quedarnos solos.

Ya de adultos este apego no va enfocado a nuestro progenitores, sino, generalmente, a nuestras relaciones amorosas. Dándose una sensación de temor a que nuestra pareja no nos quiera o desee realmente. Un aspecto que dificulta las interacciones con la pareja, esperando una vinculación mayor de la esperable en determinados momentos y superada por la que nosotros damos.

Apego evitativo

Continuando con los tipos de apego inseguro, el apego evitativo, nace cuando mis cuidadores o progenitores fueron fríos o distantes conmigo a nivel emocional.

No todas las personas somos capaces de abrirnos desde el punto de vista afectivo y enseñar todo lo que queremos a los que nos rodean, y, si las personas que cuidaban de nosotros eran así, o simplemente no nos querían, se genera una autosuficiencia con carácter compulsivo y con preferencia en la distancia emocional.

En la edad adulta este apego evitativo se traduce en un sentimiento de rechazo a la intimidad con otros y a dificultades en nuestra forma de relacionarnos.

Puede ser habitual que las personas que comparten su vida con personas con este tipo de apego, sientan una mayor necesidad de profundidad sentimental en sus interacciones.

Apego desorganizado

Este último tipo de apego nace cuando nuestros cuidadores han tenido conductas descuidadas o inseguras con nosotros. Hablamos de una situación totalmente contraria al apego seguro, en la que se produce un caso de abandono personal y emocional en la edad temprana.

Una situación o tipo de apego que se traduce en una pérdida de confianza en el que debía ser nuestro cuidador, que incluso puede llegar al miedo.

Ya en la etapa adulta, si hemos pasado por esta situación, solemos tener una alta carga de ira y frustración, y no nos sentimos queridos. Además, se suele dar el caso en el que rechacemos firmemente las relaciones, pero que en el fondo sean nuestro mayor anhelo.

¿Podemos hacer algo para cambiar la forma de apego?

Respondemos rápidamente a esta pregunta con un claro Sí, es posible.

El apego no es algo que permanezca siempre inmutable dentro de nosotros, pues va evolucionando según nos vamos desarrollando. Por otro lado, debemos de ser conscientes que somos la suma de todas nuestras interacciones y de todo aquel que nos rodea, lo cual cambia nuestra forma de pensar y de relacionarnos. Amistades, parejas e incluso relaciones laborales, todas pueden afectar al apego.

Por ejemplo, una persona con un estilo de apego inseguro en la infancia puede “aprender” de las conductas de apego seguro que le proporcionan su pareja u otras personas queridas psicológicamente saludables. Lo importante es ir generando poco a poco ese camino de autosanación emocional para conseguir el cambio que deseamos.

¿Crees que tú, tu pareja o tu hijo o hija podéis estar padeciendo algún tipo de apego inseguro y quieres dar un vuelco a esa situación? En Mensactiva somos expertas en el cuidado emocional y podemos ayudarte a superar los problemas que existan a nivel relacional en tu vida. Contacta con nuestro equipo y pide la información que necesites, sin compromisos ¡Te esperamos!.

¡Comparte en tus redes!

1Comentario

Déjanos tu comentario

Call Now Button